En Chile, pito es de esas palabras multiuso. Puede ser un cigarro o un porro, típico en la previa o después de la pichanga. También es el silbato del árbitro, ese que te corta el envión cuando estás embalado. Según el contexto, puede sonar inocente o medio pillo, y ahí está la gracia.
"Oye, pásame el pito un segundo, que terminamos la pichanga y quiero celebrar el golazo, pero si suena el pito del árbitro nos vamos altiro."