En Coahuila se dice cuando sales con la raza a cotorrear y a darle duro a la tragadera, pero terminas gastándote la lana en pura comida y cheve nomás por gusto. No es que te obliguen, es que te gana el antojo y el ambiente. Luego toca sobrevivir con frijolitos, pero valió la pena.
"Nos fuimos al centro de Saltillo a rascar dientes con los compas y entre tacos, cheves y postre, me quedé sin feria pa’ la quincena."