Se usa en la Costa Caribe para hablar de alguien que se descontrola todo loco, como si no tuviera frenos ni dirección. Es esa persona que en la rumba se le zafa un tornillo, se olvida de la vergüenza y termina haciendo show gratis. A veces preocupa, pero también da risa, porque siempre arma el desorden más sabroso.
"Mija, anoche en el picó ese man se puso como rueda suelta, se quitó la camisa, se tiró al piso a perrear y casi tumba la nevera de las polas."