En Loreto se usa para hablar del pata vivo que se mete a una fiesta o reunión sin invitación y se camufla como si fuera del grupo de toda la vida. Llega calladito, se sirve su chela, conversa con todos y al final nadie sabe de dónde salió. Es medio caradura, pero si cae bien hasta hace gracia.
"Ayer en la fiesta de la promo apareció un trepamecha que nadie conocía, y al final el conchudo se fue más borracho que el cumpleañero y con tupper de comida"