Se dice para pedirle a alguien que se calme, que baje un cambio y deje de agrandarse o de calentarse al pedo. Es como decirle que afloje con los humos y vuelva a tierra, sin tanta novela. Muy de charla entre amigos cuando uno se pone intenso. Y sí, a veces entra mejor con tonito de chicana.
"Dale, bajá el maíz, loco. Te salió una buena en el truco y ya te creés Gardel, dejá de gritar que estamos en lo de la abuela."