En Huila se dice cuando vas a meterte un plato de mondongo bien cargado, de esos que te dejan feliz, sudando y con ganas de tirarte a dormir de una. Suele salir en planes de domingo, reunión familiar y olla grande. No es solo comer, es darse un banquete con sabor a casa.
"Este domingo donde la tía Marta vamos a comer mondongo y quedamos tan llenos que ni pa' caminar, nos toca siesta obligada en la sala."