Expresión muy nariñense para decir que alguien se gastó la plata rapidísimo y sin pensar mucho, como si el dinero saliera corriendo solo. Se usa cuando uno cobra, se emociona, se va de compras o de rumba y al otro día ya está pelado. Es como admitir que la emoción ganó y el bolsillo perdió, pero con humor.
"Me pagaron el viernes y el sábado ya estaba corriendo la mula en Pasto, entre tragos, fritanga y regalitos, ahora ando más limpio que baño de clínica."