Se usa para decir que uno quedó en deuda con alguien, pero no solo en plata, también en favores y en cariño. Es como aceptar que esa persona se portó tan bien que ahora toca corresponderle de alguna forma. Suena muy de barrio, muy de confianza, y la verdad es que tiene su sabrosura costeña.

"Desde que la vecina me prestó pa' la luz y me dio almuerzo tres días seguidos, mejor dicho, yo a esa señora se la debo hasta que me muera."

¿Te gusta nuestro diccionario?

Además de rebuscar expresiones cañoneras, también contamos chistesitos.

Échale un ojo, si no te ríes en 10 segundos, te hacemos un descuento.

Tu cesta: 0,00 € (0 productos)
Imagen del producto

Tu Carrito de Magia

Tu carrito está vacío. ¡Adopta un Magikito!