Se dice de alguien que le mete un montón de esfuerzo y constancia a lo que está haciendo, sin quejarse y tirando para adelante aunque esté pesado. La imagen del lechero es la del curro duro, madrugón y ruta larga, así que la frase es un piropo al que chambea de verdad. Bien de calle y bien gráfica.
"Mira a ese pata, le echa ganas como lechero en la chamba: entra temprano, no afloja ni cuando llueve y todavía se queda para cerrar todo."