En el Estado de México se usa para decir que vas a comprar chelas u otra bebida alcohólica, pero de forma disimulada y medio inocente. Suena a que solo vas por un refresco, aunque todos saben que vas por algo más alegre. Es perfecta para usar frente a la tía persinada o los suegros sin levantar sospechas.
"Oigan, ya se acabó la caguama, ahorita me lanzo a encargar un chesco con el Bryan antes de que se nos agüe la fiesta."