En Puno se dice que alguien está blanco cuando el frío lo ha dejado tieso, temblando y con la cara dura como piedra. No va del color de la piel, sino de ese estado de congelamiento total que te deja la puna cuando sales sin chompa. Es como estar medio momificado por el frío, y la verdad es que pasa seguido.
"Hermano, has salido un ratito al aire de la noche y ya estás blanco, parece que te hubieras peleado con la helada, entra a la casa antes de que te quedes como estatua en la puerta"