Se suelta cuando alguien se funde la plata del aguinaldo antes de tiempo y queda pelando bolas en plena época decembrina. Es como decir que se gastó todo el bono navideño en pura loquera y ahora no tiene ni para un pan de jamón. Es burla cariñosa, pero también advertencia de no volverse loco gastando.
"Hermano, entre las birras en San Cristóbal y las hallacas gourmet, me faltó el aguinaldo y ahora ando pidiendo fiado hasta el pasaje pa' Rubio."