Se dice de alguien que se agranda y se hace el importante, como si fuera la gran cosa, pero en el fondo es puro humo. Va de aparentar, de querer figurar y vender una imagen que no se sostiene ni dos minutos. Muy de chicana chaqueña para bajarle los humos al que se cree mil.
"Cayó con camisa planchada y perfume barato y ya se puso a dar órdenes. Mirá al Gerardo, haciendo como el mburucuyá delante de los pibes, si no manda ni en su casa."