Se dice cuando alguien la re contra caga y arruina todo, pero encima con una seguridad bárbara, como el que se cree maestro del asado y termina quemando hasta las achuras. Aplica para cocinar, laburo, planes o lo que sea: arrancó canchero, se confió y lo dejó hecho un desastre. Duele, pero da risa.
"El Nico dijo que hacía el asado para veinte y terminó haciendo la gran asador: quemó las achuras, secó las costillas y ahora estamos comiendo pan con chimichurri."