Se dice en Panamá, casi siempre en plan vacilón, cuando parece que por fin llegó el momento perfecto para que pase algo bueno. Es como un ya era hora, hoy se prende esto, pero con ese toque de desconfianza de que seguro se sala a última hora. Ideal para promesas, planes y milagros que casi nunca cuajan.
"El man juró que hoy pagaba la ronda y yo dizque: hoy sí es el día. Llegó la cuenta, se hizo el loco y se fue pa' fuera."