En Quintana Roo se oye para decir que te vas a la playa a desconectarte un rato. No es “jalar” de trabajar, al revés: es agarrar camino, tirarte en la arena, echarte un chapuzón y dejar que el sol te reinicie el cerebro. Plan tranqui, cero pendientes y puro modo vacación.
"Ya estuvo de chamba, hoy saliendo jalamos a la playa, nos tiramos en la arena y nos echamos unas chelas bien frías."