Se usa para exagerar cuando algo que debería ser simple se vuelve un quilombo épico. No es solo una tarea, es casi una odisea digna de película de acción, con trámites, lluvia, mala suerte y todo el pack. Y hay que admitir que cuando lo contás después, te reís para no llorar.
"Boludo, ir a comprar yerba al chino con este diluvio y en pantuflas es una misión, ya fue, tomo el mate lavado nomás."