Se usa para señalar a alguien que arma un show innecesario, que exagera todo y monta un escándalo por cualquier bobada. Es como llamarle dramático, pero con sazón caribeña y un toque de burla cariñosa. No es un insulto pesado, más bien una forma de bajarle dos rayitas al teatro que está montando.
"Deja el show, tantán, que solo se fue la luz cinco minutos y ya estás llamando a tu mamá, a la vecina y al noticiero como si fuera un huracán categoría mil."
Expresión muy poblana para cerrar un tema y dejar claro que algo ya quedó listo o decidido. Es como decir ya estuvo, asunto resuelto, aquí se acaba la discusión. Se usa mucho al final de una frase para poner punto final con un toque medio juguetón y medio tajante, y la neta suena bien sabroso.
"Ya entregué el proyecto, cobré mi lana y tantán, yo ya me voy a echar unas chelas con los cuates"