Se usa para decir que algo se hizo con pura fuerza bruta, a pulmón, sin máquinas ni nada fino. Es como remarcar que se laburó duro, a lo bestia, con lo que había a mano y mucha garra. Muy de barrio, muy de juntarse con los pibes y meterle sin vueltas, aunque después termines todo dolorido.
"La parrilla del fondo la hicimos a pura yuca con los pibes del barrio, ladrillo por ladrillo, y terminamos todos reventados tomando tereré en la vereda."