Versión venezolana del clásico refrán del herrero, pero con azadón en vez de cuchillo, más criollo imposible. Se usa cuando alguien es experto en algo, pero en su propia casa o vida hace todo lo contrario o lo descuida. Es como ver a un mecánico con el carro echando humo, y hay que admitir que da risa.
"Mi papá es electricista y en la casa vivimos a media luz porque nunca arregla nada. Casa'e herrero, azadón de palo, vale, este hombre es un caso."