En Hidalgo se usa chinguita como forma cariñosa para hablar de algo o alguien chiquito, delicado o que parece que se va a desbaratar. Puede ser una persona, una mascota, una cosa frágil o hasta un carro viejito. Suena tierno pero con ese toque de picardía mexicana que la neta le da mucho sabor.
"No agarres tan fuerte a la gatita, está bien chinguita, luego la vas a dejar toda espantada y tu mamá me va a regañar a mí."