Expresión bien cordobesa para decirle a alguien que deje de flashear cosas imposibles o teorías medio ridículas. Es como bajarlo de la nube y recordarle que la vida no es un cuento de hadas. Suena medio reto cariñoso, medio cargada, y hay que admitir que a veces hace falta decirlo fuerte y claro.
"-3"