En Antioquia se usa para hablar de alguien que insiste en lo mismo una y otra vez, casi siempre metiendo la pata igual o repitiendo una cantaleta insoportable. Es como ver a alguien tropezar con la misma piedra pero ya de frente y con mapa. Sirve tanto para errores repetidos como para necedades que cansan bastante.
"Parce, ese man sí es intenso, cada que ve a la pelada vuelve y le da al timbre con el mismo cuento de siempre, ya hasta los amigos estamos mamados de oírlo."
Se usa para hablar de alguien que no cierra la boca nunca, que habla y habla como campana de iglesia en fiesta patronal. Es una forma medio en broma medio en queja de decir que la persona es re charlatana y no deja meter una palabra. Y hay que admitir que la imagen del timbre sonando sin parar es bastante gráfica.
"Che, la Tere se sentó al lado mío en el bondi y empezó a darle al timbre con el chisme del barrio, casi me bajo dos paradas antes del embole que me pegó."