Se dice cuando estás reventado, sin energía, como si te hubiera pasado un camión por encima. Puede ser por laburo, por una noche de joda o por un bajón emocional que te deja tirado. En Buenos Aires se usa un montón y suena bien gráfico, porque te imaginas hecho un bollo, literal.
"Ayer metí doble turno, después me fui a la joda y hoy estoy hecho pelota, ni para cebar un mate me da el cuerpo."