Se dice de alguien o algo que es feísimo, pero feo de verdad, de esos que te hacen mirar dos veces y pensar: madre mía. Es una comparación exagerada y muy gráfica, perfecta para soltar una pulla con humor. Ojo, que pica, así que mejor usarla con confianza o en plan cachondeo.

"Tío, el coche ese que te has comprado es feo como un perro sin dueño, parece que lo montaron con piezas de tres chatarrerías distintas."

¿Te gusta nuestro diccionario?

Además de rebuscar expresiones cañoneras, también contamos chistesitos.

Échale un ojo, si no te ríes en 10 segundos, te hacemos un descuento.

Tu cesta: 0,00 € (0 productos)
Imagen del producto

Tu Carrito de Magia

Tu carrito está vacío. ¡Adopta un Magikito!