Expresión muy usada para hablar de chamba pesada, medio castigo, que haces por obligación o por compromiso. Es ese favor incómodo que no puedes batear, pero ya que estás ahí le metes ganas para no quedar como flojo. Suele ser limpiar, pintar, cargar cosas o cualquier tarea que te arruine la flojera del día, aunque a veces hasta se vuelve cotorro.
"Mi tía me cayó en la mañana con que hoy tocaba hacer talacha, y ahí me ves trapeando, lavando el patio y pintando la barda mientras ella nomás supervisaba con su cafecito bien a gusto."