Se usa cuando alguien se prepara mentalmente para una situación tensa, pelea o cacho complicado, como que se arma de valor y se pone en modo batalla. Viene de la idea de recogerse el pelo antes de entrar al combate. Es muy de acá, bien dramática, y hay que admitir que tiene su encanto cuando uno ya está chato.

"Loco, cuando caché que el jefe venía a retarme por llegar tarde otra vez, me junté el moño, respiré hondo y entré a la oficina como si fuera final de teleserie."

¿Te gusta nuestro diccionario?

Además de rebuscar expresiones cañoneras, también contamos chistesitos.

Échale un ojo, si no te ríes en 10 segundos, te hacemos un descuento.

Tu cesta: 0,00 € (0 productos)
Imagen del producto

Tu Carrito de Magia

Tu carrito está vacío. ¡Adopta un Magikito!