Expresión boliviana para cuando alguien se pone a presumir de algo que en verdad no es gran cosa, pero lo cuenta como si fuera la octava maravilla. Es como decir que está exagerando, agrandando la historia o vendiendo humo. Básicamente, sirve para bajarle el ego al que se cree más bacán de lo que es, y la verdad tiene su gracia.
"Carlos llegó todo creído con su autito diciendo que corre a 300 por hora, que todos se van a morir de envidia, y al final ni sube la cuesta del barrio, pura manda llaukas ese chango"