Dicho bien criollo para soltarle a alguien que huele fatal, como a sudor rancio o a ropa mojada guardada. La idea es que apesta tanto que parece que trae zamuros pegados encima. Se usa en broma o para regañar con confianza, porque suena fuerte y da risa, pero pica.
"Mi pana, báñate y cambia esa franela, que desde la rumba vienes oliendo a zamuros y ni el ventilador te salva."