Se dice de ese amigo que no es solo pana, sino pana nivel familia, el que se queda contigo en las buenas, en las malas y en las peores. En La Guaira, “pana” es confianza pura: el que te cubre la espalda, te presta, te aconseja y no te deja morir. Lealtad con sabor a costa.
"Se fue la luz, se dañó el plan y el chamo igual cayó con hielo y una corneta. Ese sí es pana de por vida, mi hermano."