En Argentina pancho es el típico pan con salchicha, el hot dog de toda la vida que te clavas en el puesto de la esquina. Pero también se usa para hablar de alguien muy tranquilo, que no se hace drama por nada, incluso cuando mete la pata fuerte. A veces suena gracioso y medio irritante a la vez, según el contexto.
"Che, ¿viste a Juan? Se mandó un moco tremendo con el informe, el jefe lo cagó a pedos y el tipo quedó re pancho mirando memes en el celu como si estuviera en la playa de Las Grutas"
Manera bien relajada de llamar al clásico hot dog, aunque acá nadie le dice así. En Buenos Aires el pancho es casi una institución de puesto callejero, con papitas, lluvia de kétchup y mostaza, y si pinta, salsa golf. Es barato, rápido y perfecto para el bajón, y hay que admitir que tiene su encanto grasoso.
"Che, salimos del bondi muertos de hambre y nos clavamos un pancho con papitas en la esquina, alta gloria porteña para bancar la vuelta a casa."