En Magdalena le dicen pantaroca al pan que se pone durísimo, de esos que ya no se comen, se usan de pisapapeles o hasta de arma improvisada. Pasa cuando dejas el pancito por ahí, sin bolsa o mal guardado, y el calor y la humedad lo rematan. Es una forma exagerada y bien costeña de quejarse.
"Ñero, guarda ese pan ya, que con este calor se pone pantaroca y después ni con café con leche lo bajas."