Se dice cuando alguien se queda en evidencia y, encima, sin reacción. Metió la pata, lo pillaron y se quedó tieso, como pegado a la pared, sin saber qué decir ni dónde meterse. Sirve para esos momentos de silencio mortal en los que todo el mundo te mira y tú solo quieres teletransportarte.
"El profe le pidió que explicara la tarea y el man se quedó de pared, mirando el tablero como si le hablara. Todo el salón en silencio y él sudando frío."