Expresión bien porteña para decir que te estás cargando de cosas encima: problemas, estrés, responsabilidades o quilombos varios. Como si cada tema fuera un fierro más en la mochila y vos seguís sumando sin parar. Se usa mucho cuando estás al límite y sentís que la vida te está metiendo peso extra. Y sí, agota.
"Entre el laburo, la facu, el bondi que no pasa y el jefe rompiendo las bolas, estoy sumando fierros mal esta semana, ya no me da la nafta."