En Honduras se usa tapiar para hablar de compartir comida, sobre todo boquitas y snacks, de forma generosa y sin mucho plan. Viene del típico tapá vos y tapo yo, cuando cada quien pone algo en la mesa y todos salen ganando. Es muy de convivios, fiestas caseras y reuniones donde la comida se vuelve excusa para el relajo.
"Mirá vos, no traigo ni un cinco, pero si vos ponés las tajadas yo me encargo de tapiar las chicharrones y armamos la merienda más catracha del barrio."
En Trujillo, tapiar es meterte tanta comida que quedas reventando, como si te hubieran levantado un muro en la panza y ya no entrara ni aire. Se usa después de un almuerzo pesado, una pollada o cuando la abuelita se pone generosa y tú no sabes decir que no. Y sí, da risa, pero duele.
"Mano, en la casa de mi abuelita me tapié con arroz con pato y ahora estoy tirado en el sofá, ni para prender la tele me da el cuerpo."