En Santiago del Estero se dice que alguien está acharanguado cuando anda demasiado relajado, medio dejado, sin apuro por nada y con una pachorra tremenda. Puede ser alguien tirado a la bartola, sin ganas de laburar ni de moverse mucho. Es como vivir en modo siesta eterna, y la verdad es que un poco de envidia sí da.
"Che, nosotros corriendo para llegar al laburo y el Beto sigue acharanguado en la vereda, tomando tereré con los changos y mirando cómo pasa la vida."