Se dice cuando alguien tiene que recortar el tiempo de relax y ocio porque la vida se le llenó de quilombos, laburo o mil responsabilidades. Viene de la costumbre paraguaya de tomar tereré tranqui, sin apuro, y acá es como admitir que ya no hay tanto rato para esa paz. Y la verdad, da un poco de pena.
"Che, desde que nació su gua’i, Pedro tuvo que achicar el tereré, ahora sale del laburo, llega a la casa y ya está cambiando pañal y preparando mamadera como loco."