Se usa cuando alguien se raja a última hora por puro miedo, vergüenza o cobardía. Es ese momento en que ibas muy valiente, muy chulito, y justo antes de hacerlo te entra el canguelo y te echas atrás. Vamos, que te acobardas de golpe y quedas un poco en ridículo, aunque luego todos nos riamos.
"Ías todo valente dicindo que te tirabas do puenting e ao final te acochinaches, quedaches mirando desde a barandilla cunha cara de susto que nin o can do veciño."