Expresión bien chilena para decir que alguien anda sospechoso, medio pillo o con intenciones raras, como si estuviera al acecho esperando el momento. Se usa en talla o con desconfianza, cuando alguien llega demasiado arreglado, hace preguntas de más o se mueve raro. No siempre es acusación seria, pero deja la duda picando.

"Llegaste temprano, con camisa planchada y hasta perfume, po. ¿Qué onda? Andai al lobo, ¿ah? No me vengai con cuentos que te caché al tiro."

¿Te gusta nuestro diccionario?

Además de rebuscar expresiones cañoneras, también contamos chistesitos.

Échale un ojo, si no te ríes en 10 segundos, te hacemos un descuento.

Tu cesta: 0,00 € (0 productos)
Imagen del producto

Tu Carrito de Magia

Tu carrito está vacío. ¡Adopta un Magikito!