Se usa en La Guaira para hablar de alguien que se pone a llorar, a quejarse o a hacer un show exagerado por una tontería. Es como armar tormenta en vaso de agua, pero versión litoral central, con mar picado y todo. Básicamente, cuando alguien se pone intenso por una bobada y uno piensa que está haciendo un guaireño innecesario.

"Mariana se puso a darle al guaireño porque se le cayó una galleta al piso y empezó a llorar como si se hubiera hundido el Ávila en el mar, todo el mundo en la playa viéndola con cara de ¿y esta novela?"

¿Te gusta nuestro diccionario?

Además de rebuscar expresiones cañoneras, también contamos chistesitos.

Échale un ojo, si no te ríes en 10 segundos, te hacemos un descuento.

Tu cesta: 0,00 € (0 productos)
Imagen del producto

Tu Carrito de Magia

Tu carrito está vacío. ¡Adopta un Magikito!