Expresión navarra que se usa cuando alguien, en vez de calmar las cosas, se dedica a empeorarlas y a avivar el conflicto. Es como cuando ya hay movida y llega el típico colega que mete más chicha al asunto, sabiendo que va a explotar. Vamos, que en vez de apagar el fuego, se pone a alimentarlo a gusto.
"Estábamos medio arreglando la bronca del grupo y va el Iñaki y se pone a sacar trapos sucios viejos, todo borracho, echando leña al arán hasta que acabamos todos discutiendo en mitad del bar del pueblo"