Se usa para hablar de tomarse una cheve bien fría después de un día pesado de calor o de chamba. Se le dice suero porque según esto te revive, casi como si fuera suero intravenoso pero para el alma. Es de esas frases que suenan a playa, sudor, cansancio y ganas de pistear a gusto.
"Está pegando bien duro el sol, compa, ya acabamos la chamba, vámonos al malecón a echar un trago de suero antes de que me deshidrate de puro coraje."