En Quintana Roo decir que alguien está embarcado es como decir que se metió en un problemón del que ya no sabe cómo zafarse. Es como subirse a un barco sin saber a dónde va y ya no poder bajarte. No siempre es tragedia total, pero sí implica que te complicaste la vida bien sabroso.
"No manches, me embarqué gacho aceptando cuidar a los chamacos de mi primo todo el fin de semana, ahora ni playa ni chelas ni nada."