Se dice cuando alguien está súper entregado a algo, tan centrado que parece que ha hecho un juramento sagrado y no se puede rajar. Suele usarse para curro, estudios o cualquier movida que te tenga absorbido. Es como decir que va a muerte con eso, y oye, a veces hasta da un poco de miedito.
"Paco está de jurao con la oposición, tía. Ni sale al bar, ni ve el fútbol, ni ná, parece que lo han encadenado a los apuntes en la mesa camilla."