Se dice cuando alguien está re enganchado con una idea o una persona y no puede parar de darle vueltas. Tenés la cabeza a mil, como si un bicho te estuviera picando el bocho todo el día. Puede ser por ansiedad, por manija o por enamoramiento, y suele venir con cero paz mental.
"Che, dejá de estar embichao' con la piba, salí a tomar unos mates y aflojá un toque, que te estás quemando la cabeza al pedo."