Se dice cuando quedas repleto después de comer, tan lleno que te da sueño y solo quieres tirarte a descansar, como bebé con la barriga a punto de explotar. Es una forma chistosa de admitir que te pasaste de bandeja y ya no te cabe ni un granito de arroz. Muy de sobremesa y de risa.
"Me metí bandeja paisa, sopa y postre donde mi tía y quedé estoy nené, me tocó aflojar el cinturón y tirarme en el mueble a dormir un ratico."