Se usa cuando alguien se mete de lleno en un chisme o en una conversación ajena, preguntando y curioseando sin parar. Es como tirarse de cabeza a la salsa del salseo, sin vergüenza ninguna. Normalmente se dice medio en broma, medio en plan crítica cariñosa, porque a veces la gente se pasa tres pueblos.
"Mira a Marta, está tan funde-ese con el chisme del barrio que ni ha probado el jollof y ya va por la tercera ronda de preguntas raras"