Se dice cuando alguien está estresado o desesperado por un problema, tanto que parece que se va a arrancar el pelo de la rabia. No es tanto de currar duro, sino de estar al borde por la presión, los líos o la mala suerte. Vamos, que estás que te jalas la greña y no es por gusto.

"Mano, con ese calor y el jefe jodiendo, llevo toda la semana jalándome la greña, ya ni duermo y el tinto no me hace nada."

¿Te gusta nuestro diccionario?

Además de rebuscar expresiones cañoneras, también contamos chistesitos.

Échale un ojo, si no te ríes en 10 segundos, te hacemos un descuento.

Tu cesta: 0,00 € (0 productos)
Imagen del producto

Tu Carrito de Magia

Tu carrito está vacío. ¡Adopta un Magikito!