Expresión bien maulina para decir que alguien está súper preocupado, enredado o comiéndose la cabeza por algo. Es como estar dándole mil vueltas a un cacho y no encontrarle salida, casi tirándose los pelos del puro nervio. Suena chistosa, pero cuando uno se está jalando los pelambres de verdad, la cosa no tiene tanta gracia.
"Desde que reprobó el ramo, el Seba se anda jalando los pelambres pensando cómo le va a contar a la vieja sin que lo echen de la casa"