En Venezuela, sobre todo en el oriente y zonas cercanas, decir obligo es soltar que vas sí o sí, sin excusas y sin chance de echarte para atrás. Es como decir de ley, fijo o toca. Se usa para planes, favores o cualquier cosa que ya quedó cantada. Suena medio retador y tiene su gracia.
"Chamo, si ponen salsa y hay tequeños, yo voy obligo, así tenga que colarme por la cocina y saludar al DJ como si fuera pana."